De mi propia medicina.
Hoy me desperté con animo temprano en la mañana para irme a clases al "preu", pero por organizarme mal una pequeña nube negra se poso sobre mi. iba un poco justa con la hora para llegar al terminal a tomar el bus, y al llegar estaba justo un bus esperando por mi, pero al voltearme volví a mirar y ya se había ido, el próximo salia 7:45 (entraba a las 8:30) no me quedo otra que resignarme a llegar tarde ya no podía hacer nada, lo peor que ni siquiera atine a correr detrás del bus (lapsus de lentitud mental), llegue con un pequeño atraso de 25 min (mi primera clase y yo tarde) para mas remate entro a la sala y estaba llena (dije ya esto no puede ser peor) pero el profesor simpático y amablemente me dice: adelante!, aquí le guarde un asiento. Bueno la clase de lenguaje paso sin mayor tragedia (pero mi switch a un seguía medio cargado al negativo). La clase que venia era matemáticas.
En el receso le contaba a una chica que conocí lo que me costaba desarrollar y entender las matemáticas (razón por la des-motivación a aprender y entender). y vino la clase de matemáticas, el profesor hablo varios minutos, hasta que de repente dice: No quiero ser mala onda, pero no faltan los que llegan a clases con la idea de que no saben, de que les cuesta, de que esto no es para mi. Si van a estar en mi clase, tienen que cambiar el switch y decirse a ustedes mismos que si saben, convencerse de aquello y tener la predisposición a aprender.
En ese instante pensé: Yo todos los días y a mas de alguien le digo que el día puede cambiar si te lo propones, que tienes que pensar positivo, que si tienes las ganas puedes lograr todo lo que te propongas. Y desde ese pequeño instante cambio mi día, la tarde se me hizo bastante grata en compañía de personas que amo mucho.
Así que Carpe Diem!!
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